Anestesiología: ¿Qué es y cuáles son sus riesgos?
La anestesia es uno de los grandes avances de la medicina de todos los tiempos. Gracias a ella se pueden realizar intervenciones y cirugías sin que el paciente sufra dolor alguno o llegue a entrar en shock. Desde su creación, la anestesiología ha avanzado considerablemente, pasando de utilizar sustancias muy rudimentarias o con fuertes efectos secundarios y riesgos, a ser una disciplina cada vez más segura y con numerosas opciones.
Tanto es así, que se le ha llegado a rendir homenaje y se ha proclamado incluso el Día Mundial de la Anestesia, que se celebra mañana día 16 de octubre. Hoy, desde Vital Seguro vamos a hablar sobre ella, sus avances, los tipos que existen y sus posibles riesgos.
Qué es la anestesiología
La anestesiología es la rama médica que se encarga de estudiar, practicar y aplicar la anestesia a los pacientes que la necesitan.
La anestesia es una combinación farmacológica que consigue generar en el paciente un estado de relajación e inconciencia o, simplemente, dormir una zona concreta del cuerpo para evitar sentir dolor.
Durante las intervenciones que requieren anestesia, el especialista está presente en todo momento para regular la dosis y supervisar las funciones vitales del paciente. Previa a la operación, la persona debe entregar una serie de pruebas médicas al anestesiólogo y tener una entrevista con él para determinar el tipo de medicamento y las dosis que se deberán aplicar.
Tipos de anestesia
Desde el rudimentario éter que se hacía inhalar a los enfermos antes de operarles, en la antigüedad, la anestesiología ha avanzado a pasos agigantados.
Actualmente, existen diferentes tipos de fármacos anestésicos y de formas de aplicación.
- –Anestesia local, que se utiliza para adormecer una pequeña parte del cuerpo, aunque el paciente es capaz de mover la zona y permanece totalmente despierto. Es el caso, por ejemplo, de lo que utilizan los dentistas o los dermatólogos para extirpar un lunar.
- –Anestesia regional. Este tipo de anestesia bloquea el dolor de una parte más extensa del cuerpo, dejándola completamente inerme hasta que se pasa su efecto. El caso más conocido de anestesia regional es la epidural, utilizada en los partos.
- –Anestesia general. En este caso, el paciente entra en un sueño profundo en el que, ni recuerda la cirugía, ni siente dolor alguno.
Riesgos de la anestesiología
Sin duda, la anestesia es un avance importantísimo para poder realizar operaciones y procedimientos médicos sin que el paciente sufra dolor. A día de hoy, no nos podríamos imaginar una cirugía sin ella o que nos saquen una muela sin dormirnos la zona previamente.
A pesar de ello, y de que es una disciplina cada vez más segura, no está exenta de riesgos. Algunos riesgos pueden ser causados por la propia anestesia, mientras que otros derivan de la intervención en sí.
La anestesia es un proceso muy seguro, aunque si el paciente tiene una edad muy avanzada o enfermedades importantes sí puede conllevar algún riesgo.
- -Bajada de tensión.
- -Problemas de ventilación.
- -Problemas cardiacos o pulmonares.
Las incidencias por culpa de la anestesia son muy bajas, por lo que no debe temerse. Sí es importante realizar todas las pruebas previas y comentar cualquier duda con el anestesista antes de la intervención.